La moneda esta en el aire


Acabo de ir a comprar ½ kilo de pan y la panadera para redondear me dio un caramelo, tenía que redondear 25 centavos, por lo cual la mire con descaro, por el descaro de darme un mugroso caramelo podrido por 25 céntimos de peso, está bien que la inflación no es la real y que el costo de vida de los carameleros se elevo por las nubes, te entiendo que por 10 céntimos me dé un caramelo pero por 25? Si por lo menos fuera un sugus max o de los caramelitos grosos, no era un caramelo que apenas tenía dos colores en el envoltorio, ni siquiera tenían  i+d en packaging, para que gastar si lo envolvían casi en papel higiénico? Bueno el punto es que  le pregunte cuanto estaba una factura y me dijo que 1$ cada una así que a los 4 días volví con las 4 golosinas y me lleve la factura, al 5to día me dio una moneda y ahí venia yo silbando bajito por la 122 con mi bolsa de ½ kg de pan  y tirando la moneda al aire como un dandee, la hacía girar por los aires y la agarraba con clase, podría haberme levantado a toda la ciudad con esa actitud canchera si no fuera porque tenía una fugazza en la boca y la remera al revés, además de que me tropecé y me caí al piso desparramando todo el contenido de la panificadora. Me levante y me hice como que me caí a propósito haciendo girar la moneda y cayo ceca, luego cara, luego cara y luego cara y luego cara y..Luego ceca y luego cara y ceca ceca …etc.

Uno piensa que si juega con la moneda puede apostar a que saldrá el lado que uno elija, y alguno dirá que sabe para donde gira la moneda pero la realidad es que si la moneda está bien la probabilidad de que gane será 50%. No solo por la obviedad de que hay 2 opciones y al dividir la posibilidad por las dos opciones te de ese porcentaje. Es extraño pero antes de que la lógica matemática nos diga que si tengo dos opciones tengo la mitad de las probabilidades de ganar, hay que probarlo. Porque si uno se pone metafísico, no hay razón lógica de porque una moneda me del 50% de las probabilidades de éxito, dependo de la física, de la mano que lanza la moneda, de la capacidad de hacer girar en gran cantidad de veces en el aire antes de caer en mano, de que la moneda tenga el centro de la gravedad en el centro mismo. Muchísimas condiciones para que la probabilidad llegue a la mitad.

Luego vienen los ensayos tirar una y otra y otra vez la moneda y anotar los resultados y a medida que seguimos aumentando pruebas vemos que tiende al 50%, es extraño pensar que la lógica no es tan lógica si no se prueba, pero el hecho de saber que tenemos ese 50 y 50 es por haber probado que así ocurriría en infinitos casos.

No vamos a aburrirnos tirando la moneda porque sino el partido nunca comienza, pero vamos a pensar en aquellos momentos en que tiramos la moneda, apostando una probabilidad de ocurrencia. A nosotros nos gusta pensar que podemos quebrar probabilidades, estadísticas, tendencias, nos gusta y es un desafío para nosotros ir rompiendo esas probabilidades, aunque sé que tengo 50% con la moneda me empecino en que en al mejor de 10 voy a tener 6 a mi favor y así vamos por la vida encontrándole un sentido a los fríos números de la estadística y probabilística.

Todos queremos ganarle al número uno, todos sabemos que la tendencia es que el mejor le gane al peor pero nos morimos de ganas porque esa tendencia se rompa. Así en otros aspectos de la vida apostamos a que las cosas van a ser diferentes. Para algunos se trata de una mera fuerza interior, en la cual proponiéndoselo y proclamándolo a las naciones las cosas cambian, algunos positivistas sonríen simpáticamente hasta que se deprimen cuando la pared de la tendencia se les cruza cual ruggeri a delantero juvenil con ansias de mostrarse.

Otros pesimistas dicen que no vale la pena esforzarse para romper la tendencia porque si ya cruzo el 51% ya conviene retirarse antes de perderlo todo, estos ni siquiera tiran la moneda, ni siquiera ensayan, hacen la cuenta lógica de la cantidad de opciones y ven como van saliendo los anteriores ensayistas poniendo mas atención a los caras largas y desconfiando de los caras felices.

Se suele aplaudir a aquel que logra quebrar la tendencia (si la tendencia era adversa) y apedrear a aquel que quiebra la tendencia exitista, se suele pensar que es más fácil de lo que parece romper las estadísticas y que aquel que no lo logra es un fracasado. Se suele pensar que es uno cuando logra romperlo para bien y que es por factores externos que uno fracasa.

En la vida las probabilidades corren como la matrix mientras neo trata de pensar porque tan buena fue la primer matrix y porque tan truchas las otras dos, una chica que tiene una pollera por las rodillas tiene menos probabilidades de ser encarada que una que tiene la terminación de la pollera 25 cm por arriba de la rotula, asumiendo que son similares en aspecto y físico.

Alguno dirá que la probabilidad de que te diga una guarangada uno de la uocra es más alta que la del banquero, claro que lo es. Pero no por su condición laboral, sino porque la probabilidad de que te cruces con uno de la construcción es más alta que la de los banqueros, lo más probable es que el banquero se ponga los lentes y hace que escribe un sms mientras te observa,  por lo cual no es que no piense guarangadas sino que esta solito y no se anima como los obreros que están en grupo y les da una protección  para la vergüenza.

Muchas probabilidades chocándose unas con otras para generar una tendencia y una probabilidad de ocurrencia, algunos llaman a esto ser prejuicioso.

Algunos hablan del prejuicio hablando de conducta fachista en la cual encasilla a las personas según su origen y de ahí asume una probabilidad de conducta de cierta gente por su origen y condición. El pobre tendera a robar, el de la villa tendera a decirte “eh amigo tene hora? No va a usa ma el celula no amigo?” y vos tenderas a cruzarte de vereda al ver a uno con gorra porque la probabilidad de que te robe uno con gorra que uno sin gorra es más alta y es duro que salga de mi boca tan revolucionaria y reaccionaria no?  Así también conozco casos de médicos y enfermeros que no atienden de la misma manera al sano de la prepaga que al que viene sin obra social, algunos les dan un tafirol y a otros les hacen todos los análisis. Y la probabilidad de que el de tafirol sea el de la gorra es más alta. Aaaaaah pablo queres tener a todo el mundo en contra? No, Soy indiferente en tenerlo a mi favor.

La probabilidad de que un drogadicto reincida es alta y  a pesar de luchar por meses y meses un día recae y decimos “pero que paso?” la probabilidad de ocurrencia era alta y… ocurrió.
La probabilidad de que haya infidelidad con compañeros de trabajo es más alta que con otra persona de otro entorno, por el simple hecho de que el tiempo que se pasa en el mismo entorno es más alto que con otras personas, y la persona casada padre de familia que tanto le sonreía a la enamorada eternal de su novio del secundario  terminan acurrucados en una noche que ambos tenían otros planes para sus respectivas parejas.

Que  sombría es la estadística pero lo que era probable que ocurra…paso. En la vida real fuera de los flashes de las grandes historias y noticias y diarios y radios y anécdotas de fin de año está la vida real que le cuesta mucho romper las tendencias y cuando apuesta por lo general pierde.
Esto no significa que todo está perdido, sino todo lo contrario, así como hay probabilidades corriendo en pos de lo negativo, hay probabilidades corriendo para que eso no ocurra, solo es cuestión de ordenarlos estratégicamente para que cuando llegue la tendencia uno tenga varios ases bajo la manga pulseando para quebrar la racha.

En un partido de futbol si pones 3 defensores la posibilidad de que te lleguen es alta más que si pones 5  y un doble 5 al mediocampo esto tal vez tengas que hacerlo si es el real Madrid o el Barcelona quien tenes al frente y luego dejar a un ligero 7 picar por el lateral para que tire el centro al 9 de área que sabe a dónde colocarla, las probabilidades a priori dirían que el real y el Barcelona te darían una paliza, pero ordenando probabilidades se puede torcer la tendencia.

Ahora quien aconseja como ordenar esas probabilidades? Quien está tirando los dados  y ordenando el espacio y el tiempo para controlar las probabilidades de ocurrencia? Acaso alguien puede soplarnos una información que nos ayude  a quebrar las tendencias negativas.

Acaso alguien puede decirnos que nuestro cuerpo puede ser regenerado y que es conveniente salir del entorno que me encerraba en la drogadicción? Acaso hay alguien que me dice que es mejor dar que recibir? Que es mejor poner la otra mejilla antes que sacar la 9mm? Alguien dijo que  debo amar a mis enemigos  también porque amar a los que te quieren es un tanto egoísta y no tiene nada de extraordinario?

Tantas verdades que rompen tendencias y logran generar nuevos ensayos y nuevas pruebas y así al cruzarte con el de la gorra tal vez lo saludes en lugar de cruzar la calle porque la probabilidad de que te robe haya disminuido, porque  también la probabilidad de que el banquero o empresario estafe haya bajado y que la atención media de los médicos sea indiferente si usas gorra o blackberry.

No es cuestión de actitud ni de forma de pensar, es prestar atención y escuchar al que da los consejos para quebrar tendencias, y lo mejor de todo esto que no todo es racional y limitado a la probabilidad.

Cuando hay una probabilidad remota de que algo suceda y sucede se llama milagro, y siempre hay que tener de tu lado al que puede dar milagros, porque no hay  mejor manera de quebrar tendencias que con una ayuda externa, donde las ataduras de las estadísticas y la probabilidad se quiebran completamente para comenzar a lanzar la moneda desde cero.

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