Rompiendo el mercado

 Hace unos cuantos lustros un grupo de referentes latinoamericanos se propusieron generar contenido y estimular la generación desde estas latitudes.

La causa de esto era que lo que llegaba era una reducción de títulos, experiencias y recursos que aunque muy buenos y edificantes, distaban mucho de la realidad propia.

La selección requería de una escala dolarizada la cual requería ante todo una búsqueda de captar el mercado latinoamericano, en segundo lugar, establecer la inversión para que eso ocurra, es decir, pagar un buen traductor y establecer una cadena de distribución para un mercado donde se gana en monedas devaluadas y las canastas de consumo se distribuyen principalmente en bienes de primera necesidad.

Ocurre esto en muchos productos. Si usted se pone a chequear las empresas de Estados unidos o Europa, cuando distribuyen sus unidades de negocios geográficamente suelen distribuir a Estados unidos de 3 a 5 partes, A Europa en 3 partes al menos. a Asia, por paises.

Pero hay otros que son un conglomerado, como lo son las islas del sudeste asiático, la parte central de áfrica, medio oriente y Latinoamérica.

El mercado existe pero no lo suficiente como para desagregarlo en espacios mas reducidos.

Para algunos sectores Sudamérica es Brasil solamente, quien lleva la punta en cuanto a PBI, y creen que en América del sur se habla portugués.

Centroamérica es México, y las islas del Caribe, son islas de México o Cuba.

En las escalas de producción, distribución y venta es lo mas eficiente que pueden distribuir sus unidades de negocio.

Así muchas de las multinacionales pecan de ingenuos con algunas políticas comerciales, pero les alcanza porque no hace falta regionalizar mas si las ganancias no son lo suficientemente atractivas para los inversores.

En contabilidad se habla de un principio de costo-beneficio en donde indica que la información perfecta esta sujeta a su costo de adquisición. 

Se deriva de este pensamiento de que la sumatoria de maximización de beneficios por cada país es inferior a la maximización de beneficios de la región "Latinoamérica" o "Latam"

Hay cuestiones que no tienen tanto que ver con el amor a la patria o el amor por la región sino por una cuestión de costos, ingresos y beneficios.

Volviendo al punto de la producción de contenidos y recursos para los obreros de la mies de estas latitudes, nos encontramos con esta situación en la cual, solo aquellos autores, referentes que puedan pasar por este filtro de costo-beneficio son los que entregaran sus productos a esta región.

Así es como nos llegaba información de como tratar con un joven de Wisconsin que sufría porque no sabía que hacer en el baile de graduación y en la "prepa", o nos enseñaban como tratar con pandillas puertoriqueñas en las metropolis newyorquinas.

Este grupo de referentes latinoamericanos comenzó a generar y estimular la producción colaborativa de recursos. Esto promovió la capacidad de adquirir información de forma horizontal, también con los riesgos de comerse algún que otro sapo, pero en buena medida, aquel que sabía retener lo bueno y desechar lo malo podía sacarle jugo en lugar de comenzar desde cero cada vez que debía iniciar su tarea.

Así también se acoplaron al movimiento de casas de estudios latinoamericanos y en cada país se comenzó a darle legitimidad a los obreros que ya habían adquirido conocimientos por lectura, modelaje y experiencia, sin tener que esperar que una persona ajena a estos entornos ponga la rubrica que certifique que era un obrero capaz.

El contexto de ese movimiento colaboracionista de recursos y contenidos estaba en auge en consonancia con el mercado de la información en internet.

A comienzos de este milenio, la huella de Napster, plataforma que permitía compartir y descargar música, seguía en otros huecos de mercado.

En esos años de popularidad de Napster todo aquel que quería escuchar música y descargarla podía hacerlo con un par de clicks.

Luego por mas que cerró Napster, sitios de descarga ofrecían sus links y plantillas para colgar en paginas y blogs.

MSN, que estaba en contra de las prácticas fraudulentas de Napster, Ares y demás, abría junto al Messenger una ventana de noticias y una pestaña de "música". Su buscador iba directo a los sitios de enlaces "prohibidos" y podías descargar la música desde el mismo servicio de Microsoft.

Tal vez no muchos sabían este dato porque estaban mas ocupados en enviar zumbidos y conectar y desconectase para llamar la atención de algún mozo o mozuela, pero así es, desde MSN se podía descargar música ya habiendo cerrado Napster y sin el riesgo de Ares.

Muchos libros comenzaron a publicarse en formato PDF y a ser colgados y distribuidos con facilidad. 

Lamentablemente a los autores les costó mas que a las disqueras poder bajar la cantidad de sitios que distribuían sus publicaciones con facilidad de encontrarse con poderosos buscadores como el de Google, que hacia su presentación sin tantos confites como Yahoo , MSN o AOL.

Google solo tenia la pantalla blanca y un espacio para poner lo que buscas y el botón de búsqueda.

En este contexto, muchos libros y recursos propios con poca repercusión se subían al ciber espacio y eran compartidos por miles de hermanos en busca de compartir conocimiento relativo a la obra.

Llegamos al 2020

¿Han leído a los fanáticos de las tecnologías de la información? son como un fandom en la cual todo parece ser una película de Disney en la cual si seguís a tu corazón vas a lograr que tus sueños se cumplan.

Sus textos hablan de las bondades del aprendizaje colaborativo, el fin del conocimiento vertical y la relación con la eliminación de la pobreza a raíz de que todos tendrán acceso a la información.

Por lo general esos textos están basados en esos primeros años del presente milenio.

La realidad es que tanto discográficas, editoriales y demás empresas que se dedican a la generación de contenido han logrado junto con los soportes web monetizar todo aquello que es información.

Ya no resulta extraño pensar, que se pagan $700 por Netflix y ver series y películas de guiones pobres. $300 por escuchar música en Spotify, y tener que abonar packs para películas premium, deportes, libros, eventos, etc.

"Todo sea para proteger a los autores que no tendrían incentivo para escribir", dicen los magnates de las editoriales, que te atan a escribir 4 libros por contrato en 2 años, y te licúan el contenido para hacerlo mas comestible para el público que le gusta leer que persona, relación o mascota es tóxica en 100 hojas con márgenes mas grandes que el texto central y espaciado a 2.5 para que no te canses tan rápido y te quede el gusto de haber terminado un libro y esperar el siguiente con ansias de "aprender".

Volviendo a esta idea de producir y generar contenido latinoamericano de principios de milenio, ya no queda mucho.

Al igual que el contexto actual, la base para Latinoamérica se asentó en Miami. Capital para todo lo que este por debajo de México.

Como está en Miami, sus costos están en dólares, y la operatoria de producción y distribución de recursos y contenidos ahora se elaboran desde la realidad del estado de Florida.

Los influencers, y personajes relevantes de estos días comprenden la realidad latinoamericana desde Estados Unidos.

Agiornándose a esta ápoca las plataformas ya no contienen material colaborativo ni gratuito, sino que hay un e-shop donde podes pedir los libros, recursos y música a valor dólar.

No dudo de las buenas intenciones de mis hermanos referentes de tales latitudes, en querer compartir lo que viven y experimentan en la ciudad que habitan para el resto de los sudamericanos y centroamericanos. Pero, ¿por qué hay un retroceso de aquello por lo cual se fundaron tales agrupaciones y asociaciones de referentes?

Como indique, en este pobre análisis, el mercado ajusta.

Lo que antes parecía revolucionario era solo ajustarse a la autopista que nos abría el mercado en esos años. Ahora hay un ajuste hacia esta forma de presentar contenidos y obtenerlos y es hacia ahí donde fueron los grupos antes mencionados.

Hasta aquí parece un problema de oferta. Cuando hay un problema de oferta, y uno q

uiere romper con lo que dicta el mercado, hace falta una inversión fuerte.

A comienzos del milenio, un empresario automotriz ingles puso de sus ingresos el dinero suficiente para fundar un medio de comunicación de habla hispana con llegada a nivel mundial.

Para esto compro la licencia de onda corta para cubrir todo el globo, y además invirtió en capital: en antenas y equipamiento de transmisión de onda corta.

Puso dinero para derechos de uso de satélite para poder retransmitir en estaciones de AM y FM. Con el objeto de poder brindar radiodifusión del "mensaje" con profesionalismo a todo el mundo.

¿Qué ocurrió en ese caso? rompió la lógica de mercado. En cuanto a beneficio económico no le produjo nada, es todo perdida. Solo puso dinero en cantidad de lo que había obtenido en sus empresas.

Así pudo poner un medio de comunicación de mayor alcance que la que tiene el vaticano que cuenta con capital propio de su banca y de los impuestos obtenidos de todo el mundo.

Ningún economista le daría esa recomendación. Un analista de mercado "hermano" le diría que lo rentable es producir libros y música y venderlos por Amazon con un markup similar al del resto del mundo, pare poder reinvertir en la misma decena de autores que escriben los mismos libros durante 30 años.

¿Y desde el lado de la demanda?

Cada hermano latinoamericano distribuye sus ingresos sujeto a lo que cuesta vivir y lo que cuesta obtener tales ingresos.

¿Si tuviéramos otros márgenes de ahorro, nuestros consumos variarían?

Una cosa es la restricción por nuestras monedas devaluadas, el costo de vida y los magros ingresos.

Otra cosa es la canasta de consumo que elegimos.

¿Cuánto de tu ingreso dispones para adquirir producción de obreros?

si la tasa de consumo se mantiene, con un incremento de ingresos eso beneficiará a los productores.

si la tasa de consumo se reduce con un incremento de ingresos, depende de si el monto nominal sigue igual o superior o inferior.

Algunos dicen que esperan poner más dinero en productos que sean buenos, hasta tanto no lo sean no comprarían tales productos. Entonces así es como lo vemos adquirir la entrada para un trapero que se tatuó la cara y hace rimas que dicen que todos querían bajarlo pero ahora lo envidian porque llegó, porque se propuso cumplir sus sueños y se ríe de la gilada porque no le da cabida.

Pero para el hermano que comienza su carrera artística, no le ahorra ni la Sube cuando lo ve esperando en la parada de colectivo.

Desde la demanda también se puede romper el mercado, disponiendo el dinero para usos que el mercado no quiere. Para ayudar a tus hermanos que están vendiendo pizzas, empanadas, los que piden un bono contribución para comprarse los instrumentos, pagarse los cursos de canto, y las fotocopias en la facultad de bellas artes para poder mejorar en el arte generado.

Desde la demanda se puede romper el mercado aumentando la tasa de consumo de bienes producidos por hermanos, y sobre todo los que están surgiendo. (los ya consagrados que antes eran perseguidos y ahora son stablishment, ya tienen lo suyo)

Pague la entrada para sus jóvenes que se presentan en un auditorio, asista y comparta la publicación de libros de sus hermanas y hermanos locales, compre sus productos.

La demanda también rompe el mercado. No vaya a medirle el nivel de afinación, o la calidad de sus primeras letras, mire que en estos años yo he visto cada zapato pararse en púlpitos que no podían cerrar una idea y sin embargo se sientan en las mesas vips y saludan como miss universo cuando pasillean en los auditorios.

La demanda rompe el mercado, porque sino la tendencia va hacia el averno, por mas esfuerzo que se haga, uno puede ser soporte de otro. ¿O qué pensaba? ¿Qué esto de soportarse unos a otros se trataba de aguantar al inaguantable?

Yo particularmente tuve la dicha de poder experimentar de hermanos que rompieron la demanda conmigo, ayudándome en mis estudios, con comidas caseras, con invitaciones dominicales. 

He oido mucha payasada acerca de que el creador se manifiesta cuando alguien conecta una guitarra y un teclado a un amplificador y repite la estrofa muchas veces.

Yo he visto la manifestación del reino cuando hermanos rompían el mercado.

¿Y que hay del producto?

Ya tenemos un quebrador de la oferta y un quebrador de demanda, pero falta analizar el producto en sí.

Tanto la oferta y demanda no son solo reveladores de preferencias, en la cual bajan o suben el pulgar comprando o invirtiendo. Sino que además como se mencionó son de soporte y guía para que el producto llegue a un lugar esperado.

El producto en sí tiene un vínculo con la oferta y la demanda, no puede considerarse iluminado o como Disney propone "ser uno mismo" "seguir tus propios sueños" "desearlo con todas tus fuerzas" etc.

Este pensamiento individualista en la cual establece que el que llega al objetivo es porque lo hizo por su esfuerzo y por ninguna otra fuerza es la que impera en estos dias.

Mientras tanto un montón de gente esta esforzándose hasta las lagrimas y el desmayo y no puede conseguir las metas propuestas, pero para el pensamiento individualista su "fracaso" es por causa de su no esfuerzo, o su no deseo con todas las fuerzas o por abandonar sus sueños y no ser uno mismo.

El producto debe considerar que ya se por oferta o por demanda hay un crédito que se le esta otorgando sin merecerlo.

Esta oferta y demanda que rompe el mercado obra con gracia y misericordia tal cual se le enseño. No espera la devolución del crédito, sin embargo invierten y consumen el producto, pagando lo que no vale en el mercado.

El producto entonces debe considerar esto como la guía y el soporte para crecer y buscar hacer lo que hace cada vez mejor.

En el análisis del emprendedurismo se debe tener en cuenta que hay personas que actúan en primer termino quebrando el mercado. Primero la familia, luego los amigos.

No incluyo en la oferta y demanda a la familia, porque ellos son los primeros en hacer cosas distintas a lo que pide el homo economicus. Son ellos los que te alimentan, te cubren del frio y te protegen del calor, e incluso relegan sus gustos y preferencias en favor de la familia. 

Dice un antiguo texto de que aún los padres siendo malos saben dar cosas buenas a sus hijos. Por lo que aún en la variedad de paternidades que existen la mediana suele romper el mercado.

Así también cuando el que ofrece el producto lo anuncia al mundo, los primeros que lo adquieren sin considerar el mercado es la familia, luego siguen los amigos.

Ahora esto no será eterno, la familia y los amigos no pueden romper en continuo el mercado para mantener un producto que no intenta ajustarse en precio y calidad.

El primer objetivo de un emprendedor es aprender a andar en bicicleta sin rueditas, es decir sin depender de la familia y amigos. su producto debe buscar llegar a meterse en el mercado de tal manera que un extraño cuando lo vea se muestre indiferente a adquirir ese producto o un alternativo sin tener que apelar a la lastima, o tener que "quebrar" el mercado haciendo un favor.

Concluyo resumiendo que existen estos tres actores que intervienen en la búsqueda de tener algo diferente a lo que nos ofrece este mundo.

Desde la oferta, un inversor que rompa las reglas de lo que el mercado dicta que hay que emprender.

Desde la demanda, un consumidor que rompa las reglas del mercado que dicta que es lo que se debe consumir.

Desde el producto, un generador de contenidos y recursos que entienda que lo que recibe de los hermanos ya sea por oferta o demanda es por gracia, que por mas que no se le demande lo que se paga o invierte por el mismo, es un crédito.